lunes, 30 de junio de 2014

Cinco para la gloria: el 2014 hasta el momento

Hay varias razones para que publique esta lista de lo mejor y/o más interesante que he visto en estos primeros seis meses de 2014. La razón más importante es para compartir mis impresiones pero la razón principal es que soy adicto a las visitas a mi blog y hace mucho que no las hacéis. Así que agarraos los machos y viajad conmigo en el corto, intenso y superfluo viaje a lo que me ha parecido ser lo mejor y/o más interesante de lo que va de año. Cinco películas he elegido. Por supuesto, son sólo las estrenadas en España entre el 1 de enero de 2014 y el 30 de junio de 2014. Y son sólo desde mi modesta y, por qué no, subjetiva opinión.


1. Frances Ha: la más perfecta.

Dirigida y coescrita por Noah Baumbach y protagonizada y coescrita por Greta Gerwig, confieso que fui al cine con expectativas. Esas expectativas se vieron cumplidas y, ante mi asombro, sobrepasadas ya que esperaba una película indie de corte reflexivo y tirando a lenta y lo que me encontré fue la película más divertida de lo que llevamos de año. Sólo me asalta una duda, una pregunta: ¿conseguirá mantenerse la primera en mi lista durante otros seis meses?


2. The Wolf of Wall Street: mejor relación duración-ritmo.

Peter Jackson, te presento a Martin Scorsese. Martin, te presento al pesado de Peter. Ahora, lucharéis por un puesto en la categoría de Películas de Tres Horas que se Pasan Volando. Lo siento, Peter, Martin te ha dado una buena paliza. Eso es, esta película dura mucho, te estampa contra la butaca por su ritmo frenético y, cuando acaba, dices “gracias a Joss que ha durado lo que tenía que durar y no han cortado metraje”. Y eso, si me permitís, son palabras mayores.


3. Only Lovers Left Alive: chúpate esa, Crepúsculo.

Esta es la última que he visto y la que me ha dado una sorpresa más agradable. En su lentitud y romanticismo, he encontrado una película que me ha reconciliado con los vampiros, porque Crepúsculo me había hecho odiarlos un poco. También es verdad que Buffy, cazavampiros me ayudó en la recuperación, pero son Adam y Eve los que me han hecho recuperar la fe en los vampiros existenciales y depresivos. Porque vivir tantos años te tiene que dejar tocado del ala.


4. Upstream Color: rara, extraña y, por ello, la más interesante.

Vale, ciencia-ficción o eso parece. Hay cerdos, hay historia de amor, hay cosas raras e incomprensibles y un guion de lo más barroco. Pero me gustó a pesar de que me dejó el cuerpo chafado y la mente destrozada de tanto hacerme pensar. Quizá me gustó por eso, porque a veces, de vez en cuando, necesito una película que me haga pensar en vez de hacerme reír y disfrutar. Esta es la mejor película que puedes ver si necesitas exprimirte el cerebro, intentando averiguar qué narices te intenta contar el multi-tarea Shane Carruth (director, guionista, compositor, montador, productor, director de fotografía, operador de cámara y coprotagonista).


5. Dom Hemingway: mi debilidad por el cine gamberro.

Dicen que la comedia está infravalorada, y tienen razón. Pero entre la comedia sofisticada y de humor inteligente (yo qué sé, Woody Allen por ejemplo) y la comedia vulgar y guarrindonga (Torrente y unas cuantas de Hollywood), hay un tipo de comedia que no está prácticamente ni considerada como cine: la comedia gamberra, esa que no es especialmente guarra ni especialmente inteligente pero que hace y dice brutalidades y usa tanto el gag visual como el gag verbal. Y, además, tiene una tendencia a la épica anti-épica, sin trompetas ni Wagner. Pues bien, para mí, Dom Hemingway es el mejor ejemplo de ese tipo de comedias que están injustamente a la altura del betún de lo que va de año.


Sólo queda preguntarme si Boyhood, Guardians of the Galaxy, Open Windows, Interstellar, El Niño, Magic in the Moonlight, Lucy o Gone Girl, entre otras que pueda i a ver, lograrán desbancar y/o acompañar a estas cinco películas que tan pedantemente he elegido.


Gracias por vuestra atención y espero que no hayáis perdido mucho tiempo.

martes, 17 de junio de 2014

Tricoticotá, tricoticotí

Tricoticotá, tricoticotí.

Crece en el mar
una aurora singular.

Tricoticotá, tricoticotí.
Amanece sin alma
una vida en calma.

Tricoticotá, tricoticotí.

Resuenan trompetas
a falta de tormentas.

Tricoticotá, tricoticotí.

Supuran las heridas
que jamás serán vencidas.

Tricoticotá, tricoticotí.

Te cuento un chiste
porque ayer me viste.

Tricoticotá, tricoticotí.

Me meo en la acera
porque eres una pesetera.

Tricoticotá, tricoticotí.

Pliegas tu mirada
y salgo de la nada.

Tricoticotá, tricoticotí.

¡Ay, eres mi hermana,
no seas marrana!

Tricoticotá, tricoticotí.

Cometimos incesto
y comimos pisto.

Tricoticotá, tricoticotí.

Tricoticotá, tricoticotí.

Tricoticotá, tricoticotí.

Tricoticotá, tricoticotí.

martes, 3 de junio de 2014

Carta Magna Forestal

Pestilentes y malolientes, dicharacheros y parlanchines antropófagos de manual: a vosotros os hablo. Basta de animaladas sin conocimiento de causa, parad de una vez de hacer gamberradas sin alma. Provocad a la estabilidad, desequilibrad el balance con buenos motivos. Devorad a los que se creen superiores y alimentad a vuestros iguales con las frutas honradamente conseguidas. Derruid cuanto queráis, celebrad las victorias del rival sin igual. Atacad al ser humano acomodado e incomodadle con palabras toscas y sin censurar, no actuéis sin justificar.

Atraed a más pestilentes y malolientes, dicharacheros y parlanchines antropófagos de manual a vuestra causa; alabad la anarquía de vuestras mentes y abrazad el caos que impera en vuestros corazones. Atrancad las puertas de vuestras viviendas, atrincheraos en las barricadas tan difícilmente construidas para soportar los tiempos que vivimos, proteged vuestras cabezas de las hostias dolorosas de vuestro opresor. Agarraos los testículos con las dos manos, apretad los dientes y, por fin, rebelaos. Agarraos los ovarios con las dos manos, apretad los dientes y, por fin, rebelaos. Corred con celeridad hacia el fin de los tiempos del sometimiento, desbancad al tirano que con mano de hierro y cabeza de plasma omite vuestras palabras tras ignorarlas con mucha insistencia. Matadlos, intelectualmente. En lo físico ni tocarlos.

Respirad y sentid el aura de libertad, la sensación envolvente y las alas que os crecen en la espalda con sabor a eternidad. Brillad descaradamente en medio de la oscura noche, sin ánimo de lucro, por pura humanidad. Iluminad el camino a los que están perdidos, ellos y ellas os lo pedirán; dejad tranquilos a los que se han encontrado, ellos y ellas lo omitirán. Ayudad a quien lo pide y preguntad si necesita ayuda al que lo calla, pero no le impongáis una ayuda que no es bienvenida. Descansad al séptimo día, pero sobrevolad las cercanías de la felicidad absoluta y la libertad perpetua y temed el regreso de la promesa angelical.

¿Qué es eso que todas llaman libertad? ¿Cuántas la han tocado con sus manos? ¿Existe tal cosa? ¿O es una ilusión? ¿La vida es libre? ¿La vida es sueño? ¿La vida merece la pena ser vivida? Admirad los paisajes del planeta: las montañas, los valles, los océanos, las personas, las mentes, los cielos, las personas. Somos exactamente iguales por ser todas diferentes, somos perfectas por tener todas y cada una imperfecciones. Y el único defecto reprochable es la violencia.
Siempre vuestro,

Robín Hood.