lunes, 4 de noviembre de 2013

MANIFIESTO COMUNICÓLOGO


Bases, principios, directrices, derechos y deberes de los comunicólogos.


1. La comunicología no es la definición de la palabra que da la RAE, ni una religión, secta u organización jerárquica. Se asimila más a una comuna hippie.

2. En la comunicología se recogen los siguientes campos: cinematografía, música, televisión, literatura, radiofonía, fotografía, arte pictórico, la procrastinación en Internet y el arte de hacer el ridículo. Ninguno de los campos excluye a otro. El verdadero comunicólogo profesa todos. El verdadero comunicólogo no existe, son los padres.


Iniciación a la comunicología.

Proceso de inserción en la comuna comunicóloga.

3. Cualquier persona tiene el potencial de ser comunicólogo. Debe cumplir al menos cuatro de los siguientes requisitos:

            3.1. Devoción: debe ser amante de al menos uno de los campos nombrados en 2.

            3.2. Diversión: debe haber acudido a al menos una fiesta organizada por un miembro de la comuna.

            3.3. Conexión: debe participar en un grupo de whatsapp formado por otros comunicógos a fin de estar siempre en comunicación.

            3.4. Resistencia: debe haber visto El nacimiento de una nación, de Griffith. Tendrá un nivel superior si ha visto Andrei Rublev entera. Aunque es inútil porque no hay niveles.

            3.5. Aplicación: debe ser estudiante de Comunicación Audiovisual. No vale ninguna otra carrera, ninguna.

4. Nunca será necesario que un nuevo miembro supere ninguna prueba o tipo de novatada. Sin embargo, si la persona en cuestión así lo desea, no podrá poner objeciones a las pruebas de los miembros más veteranos. Esta prueba podrá servir de sustituto a la carencia de algún requisito explicado en 3. Los comunicólogos son, por definición, unos cabroncetes.


Desarrollo de la comunicología.

Obligaciones y derechos de la persona comunicóloga.

5. Una vez ingresado en el grupo, cada individuo será libre de hacer lo que le plazca. Se recomienda el visionado de películas, series de televisión o exposiciones de arte, así como la lectura de libros, novelas gráficas, cómics y tebeos o la audición de cualquier tipo de música o programa de radio. No hay nada prohibido. Se puede practicar sexo. Se puede practicar el onanismo. Por favor, practicad el onanismo.

6. El individuo comunicólogo debe ser absurdo y surrealista. Por favor, si ve que usted no lo es, participe de las conversaciones absurdas del resto de comunicólogos para salpicarse de este arte. O váyase a su casa y practique el onanismo. Si no sabe lo que es, limítese a amarse a usted mismo muy fuerte.

7. El o la comunicólogo o comunicóloga siempre debe estar feliz. Si esto no se cumpliera, el resto de miembros de la comuna deben hacer lo posible por sacarle la sonrisa al miembro doliente. Preferiblemente mediante bromas y preceptos absurdos o relacionados con algún campo de 2. 

8. Los comunicólogos deben estar siempre, no importan las circunstancias o los avatares de la vida, rectos como pollas. Este es un principio tanto indiscutible como absurdo.

9. Los comunicólogos acudirán siempre a las clases universitarias, a menos que no les apetezca.

10. Los comunicólogos tendrán la obligación de acudir al cine al menos una vez a la semana. A menos que no tengan dinero, o no les apetezca.

11. Todos los comunicólogos acudirán a la llamada de Eloíííííííííííí.

12. Quienquiera que se tome estos preceptos al pie de la letra disfrutará de una vida mucho más absurda, surrealista y feliz de lo que ha vivido hasta el momento. A menos que no le apetezca, en ese caso será feliz igualmente.

13. Cada comunicólogo o comunicóloga podrá adherirse al árbol genealógico de la comuna.


Finalización de la comunicología.

Proceso de salida de la comuna comunicóloga.

14. No se puede. En realidad sí es una secta.

15. Para salir hay que morir. A picotazos.

16. La única forma de salir vivo de aquesta secta, perdón, comuna es gritar DRAMA y huir corriendo de donde quiera que se esté trotando cual cuadrúpedo, bailando como Shakira sin música y croqueteando en la cama hasta el fin de los tiempos. A la vez. El resto de comunicólogos, para aprobar esta huida han de aplaudir dando la mano al de al lado. Es preferible tener una grabación de estos hechos para probar que efectivamente ya no se forma parte de esta secta, perdón, comuna.



Anexo.


17. Todos los comunicólogos pueden sumar los preceptos que quieran a este manifiesto siempre y cuando sea respetuoso con el medio ambiente. Todas las veces.

2 comentarios:

  1. 18. Todo buen comunicólogo debe podar su jardín y abonarlo con cagarruta de centauro.

    Un saludo.

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